El Xeneize demostró un desempeño muy diferente al que mostró en Mendoza la semana pasada y, ya clasificado a octavos, le ganó 4 a 0 al equipo venezolano.
Boca estaba más obligado a cambiar la imagen que había mostrado ante Godoy Cruz, que a alcanzar el primer puesto del Grupo F; sin embargo, logró los dos objetivos: ganó, gustó, goleó y quedó puntero con 13 puntos, producto de cuatro victorias, un empate y una derrota.
Al principio del partido, lo único positivo era Barco, a quien Almirón posicionó como volante por la izquierda. El resto de los jugadores no convencía e incluso tenían errores con la pelota. No había conexión entre las líneas y Monagas aprovechaba para acercarse al arco rival.
El envión vino anímico llegó con el primer tanto a través de Weigandt, quien apareció por atrás de todos y definió sin marca. El resto de los goles los hicieron Barco y Vázquez, quien anotó un doblete.
Los dirigidos por Almirón deberán esperar para conocer su rival el octavos, pero mientras, por la Liga Profesional, se enfrentará a Sarmiento de Junín en la Bombonera el próximo domingo desde las 21.30.
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