La mayoría de los comercios de Rosario no podrán pagar la suma fija de $60 mil establecida por el gobierno nacional, según indicó el presidente de la Asociación Empresaria de Rosario (AER) Ricardo Diab.
El ministro de Economía y candidato a presidente por Unión por la Patria Sergio Massa, anunció el domingo un incremento salarial no remunerativo, por única vez y a cuenta de futuros aumentos en las discusiones paritarias de $60 mil, que serán pagados en dos cuotas mensuales, en septiembre y octubre. Este incremento se aplicará a empleados públicos y privados cuyos ingresos netos sean inferiores a $400 mil mensuales.
En este marco, durante una entrevista con un medio local, Diab -en línea con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came)- cuestionó las medidas del gobierno. Explicó la diferencia entre el sistema de ajuste mediante paritarias y una imposición y mencionó que recientemente se cerró una paritaria ajustando el pasado y previendo el futuro, y que tanto el sector sindical como el patronal pueden reunirse y discutir la realidad del sector y llegar a acuerdos razonables. En cambio, cuando es una imposición, sin tener en cuenta la situación de cada sector en particular, se decreta algo linealmente.
Al ser consultado sobre la afirmación del Estado de que una parte de la suma fija será absorbida por una disminución de los aportes patronales, Diab destacó que la problemática radica en que muchas veces los anuncios se realizan de una manera y luego se implementan de otra manera. Además, mencionó que obtener ese resarcimiento genera otra situación en la cual los empleadores terminan pagando de su propio bolsillo, sin que el Estado se responsabilice. Incluso si esto fuera cierto, no sería suficiente.
Asimismo, el presidente de la Asociación Empresaria de Rosario también mencionó que, según las conversaciones mantenidas con diferentes sectores, la gran mayoría de los comercios de Rosario no podrán pagar esa suma fija. Sin embargo, descartó la idea de llevar la situación a juicio, enfatizando en que son partidarios del diálogo y les preocupa la falta de un espacio donde puedan conversar y debatir.
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