Las estructuras llegaron desde Asturias, España. Pasaron por el puerto de Zárate y ya se encuentran en Fisherton. La intención es que estén disponibles en febrero del 2024.
En el Aeropuerto Internacional Islas Malvinas comenzaron a montar las estructuras que conectarán el nuevo edificio con las aeronaves. Se trata de un anhelo de las autoridades que dotará al aeropuerto de un servicio acorde a la ciudad.
Si no hay contratiempos técnicos, se espera que las estructuras estén en funcionamiento en febrero del próximo año. Las mangas, en tanto, fueron adquiridas a una empresa española y llegaron hace pocos días al puerto de Zárate. Desde allí se transportaron en camiones que llegaron al aeropuerto rosarino durante el fin de semana.
Eduardo Romagnoli, presidente del directorio que administra la terminal aérea, se mostró cauteloso al hacer el anuncio. Detalló que se está verificando que todo haya llegado en buen estado. Además, destacó que este logro representa saldar una deuda histórica del aeropuerto y admitió que fueron muchos años de espera.
Lo concreto es que con la llegada de las mangas y otros materiales, se comenzó a montar toda la estructura. Es un un proceso que tomará alrededor de veinte días. Son dos pasarelas telescópicas que permitirán a los pasajeros acceder directamente a las aeronaves desde el edificio de la terminal, sin tener que desplazarse por la pista. Esta situación resultaba incómoda, especialmente en días de mal clima.
Sobre el nuevo edificio
El nuevo edificio será funcional y de uso flexible para todo tipo de vuelos. Estará disponible tanto para internacionales como domésticos. Además, estará funcionalmente conectado con la terminal existente. Mientras, una vez que se complete la ampliación del edificio, la terminal aérea sumará 4.800 metros cuadrados en una transformación histórica y muy esperada.
Contará con dos plantas donde se ubicarán las salas de embarque y arribo, el área de entrega de equipaje y las oficinas de organismos y servicios. También se construirán dos puentes que conectarán la nueva terminal con el núcleo que contiene las pasarelas de embarque, conocidas como “mangas”.
Asimismo, habrá un nuevo núcleo de escaleras y ascensores al noroeste de la terminal actual para facilitar los desplazamientos de los pasajeros entre los dos edificios.
Este proyecto fue generado durante la gestión del gobernador Miguel Lifschitz. Sin embargo, la pandemia obligó a un cambio de criterio. En tal sentido, tanto la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) como el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA) recomendaron firmemente realizar esta modificación.
Una vez instaladas, llegarán a Rosario técnicos españoles de la empresa constructora para capacitar al personal del aeropuerto en el uso y mantenimiento de estas estructuras.