La medida avalada por el Sindicato de Recolectores sería para reducir el volumen de basura. Ambientalistas argumentan que este tipo de prácticas son perjudiciales para la salud y el ambiente.
En el marco del debate por el nuevo sistema de gestión de residuos sólidos urbanos presentado por la Municipalidad el año pasado, el Sindicato de Recolectores de la ciudad propuso la incorporación de incineradores de residuos como una de las posibilidades a implementar para minimizar el volumen de basura que va a disposición final. Esta propuesta fue cuestionada por los ambientalistas, quienes argumentan que este tipo de prácticas son caras y tóxicas para el ambiente, además de agravar la crisis ambiental y climática.
Desde el Sindicato de Recolectores de Rosario manifestaron su apoyo al proyecto de la Intendencia y pidieron que la totalidad de los contenedores deben ser metálicos para evitar casos de vandalismo. “Y debe analizarse la posibilidad de trabajar sobre la incineración (de residuos), que ya se practica en muchas ciudades de Europa”, agregó Marcelo Andrada, titular del gremio.
En contra de la propuesta, desde el Taller Ecologista señalaron que discutir la posibilidad de incorporar la incineración de residuos “en el año 2023 es anacrónico” y que se necesitan soluciones reales a la crisis ambiental y climática. Añadieron que la incineración es la tecnología más cara para gestionar residuos y que su lógica de funcionamiento condena a las ciudades a terminar desinvirtiendo en estrategias sustentables para gestionar los residuos. También destacaron que este tipo de prácticas compiten con el reciclaje, por lo que son una amenaza al trabajo de cartoneros y recicladores.
En cuanto al proceso de incineración, explicaron que los residuos se convierten principalmente en gases que terminan en la atmósfera y cenizas, y que estas cenizas son mucho más peligrosas que la basura en sí y deben ser dispuestas en forma segura, mientras que los gases afectan el clima y contienen sustancias tóxicas para la salud, como dioxinas y furanos.
La discusión por el nuevo sistema de gestión de residuos sólidos urbanos se lleva a cabo en las comisiones del Concejo, que tienen un año y medio por delante para discutir las propuestas que elevó el Ejecutivo al Palacio Vasallo. El vencimiento de las concesiones de las empresas encargadas de la recolección de basura domiciliaria en los barrios tenía fecha para julio del 2022 y es por eso que los ediles tuvieron que dar lugar a un pedido de prórroga por parte del Ejecutivo, el cual está vigente y durará hasta el 31 de julio del 2024 o hasta el inicio efectivo de la prestación del servicio por parte de los nuevos adjudicatarios de la nueva licitación pública.
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